Dentro de la Semana Cultural hemos salido de excursión al Geocentro Monfragüe de Casas de Miravete y hemos hecho la ruta de los trampantojos de Romangordo. Comenzamos.
Lo primero fue subirnos al autobús a las nueve de la mañana y salir hacia el primer destino: Casas de Miravete. Allí, visitamos el Geocentro Monfragüe donde Dani, con mucha amabilidad y paciencia, nos explicó un montón de cosas que no sabíamos sobre rocas, minerales, fósiles, el espacio, Marte... Al terminar merendamos para reponer fuerzas.
Tras merendar nos pusimos en marcha hacia el embalse de Zamarro, bonito recorrido de unos 3 kilómetros donde pudimos disfrutar de la flora y la fauna del lugar y de un paseo agradable.
Al llegar hicimos dos grupos: uno se quedó jugando en el merendero a juegos de mesa y el otro bajó a batear la pirita con Dani, que nos enseñó cómo hacerlo y nos demostró que no es tan difícil. Al terminar el primer grupo nos cambiamos de actividad para que todas y todos bateáramos y jugáramos.
Después, a comer.
Con el estómago lleno deshicimos el camino para volver al Geocentro para despedirnos de Dani y agradecerle la jornada tan chula que nos había proporcionado, nos montamos en el autobús y nos dispusimos a ir al último destino del día: Romangordo.
Llegamos a Romangordo y subimos hasta el inicio de la ruta de los trampantojos, que son unas pinturas y murales que podemos encontrar en paredes y puertas de cocheras y corrales por todo el pueblo y que nos recuerdan cómo se vivía en esta localidad hace ya bastantes años. Por cierto, se llaman trampantojos porque son una "trampa para el ojo" (parece que es real pero está pintado), como nos contó la agente cultural del centro de interpretación de los aromas cuando fuimos, semanas antes, a inspeccionar la excursión.
Tras hacer la ruta y conocer el pueblo nos montamos por última vez en el autobús y partimos hacia casa. Llegamos cansados y cansadas, pero alegres.
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